¡El verano ya llegó!… Otra vez. Se prodiga a los poquitos el jodío, no vaya a ser que nos acostumbremos. Pero esta semana tenemos solazo y temperaturas más que agradables… Vamos, una gozada. Tanto, que da penita quedarse en casa. Aunque sea para cocinar bizcochos. Pero tengo que reconocer, que lo que apetece de verdad, verdad, es quedar con amigos y compartir un buen rato y buena conversación. Y si se tercia, también buena comida, ¿verdad?

Así que para los que tengan los días perezosos, pero quieran quedar como marqueses, nada mejor que estas deliciosas galletas. La receta la he encontrado en Bocados de cielo, un blog que está divino. Me encanta todo lo que cuelga Clemenvilla (que es la bloguera) por rico, original y porque lo presenta siempre estupendamente.

He modificado un poco los ingredientes para adaptarlos más a mis gustos. Para mí no hay nada mejor que el aceite de oliva virgen extra y la harina integral, así que no podían faltar aquí. Si a eso le sumamos que me encanta el queso, pues no os sorprenderéis si el que he escogido es uno con sabor intenso para que se note bien en cada mordisco. Y, como hago publicidad siempre que puedo de mi tierra adoptiva, pues nada mejor que un San Simón: queso de tetilla ahumado delicioso, equilibrado… ¡alucinante!

Quedan muy hojaldradas. Las podréis acompañar de cerveza o una copa generosa de un buen Mencía. Son fáciles de hacer, pero mucho más fáciles de comer. ¡Espero que os gusten! ¡¡Xose, van por ti!!

INGREDIENTES:

100 gr de queso San Simón rallado

75 gr de aceite de oliva virgen extra

2 cucharadas soperas de agua

150 gr de harina integral

Una pizca de sal (si queréis)

Tamizar la harina y reservar. Rallar el queso sobre el cuenco en el que vayáis a mezclar los ingredientes. Para ganar tiempo precalentar el horno a 180º con calor envolvente.

Añadid el resto de ingredientes y amasar con las manos hasta que quede todo bien ligado. No os excedáis, no requiere mucho trabajo. Dejad reposar en el frigorífico durante media hora.

Una vez reposada la masa, podéis darles forma a las galletas con un corta-pastas o hacer bolitas y aplastarlas con las palmas de la mano. Para lo primero poner la masa entre papel film y darle con el rodillo hasta que tenga un grosor de 4-5 mm. Colocarlas después sobre papel vegetal, en la bandeja del horno, a media altura. Dejar cocer 15 minutos o hasta que se pongan doradas. 

Ponerlas a enfriar sobre una rejilla y consumir a discreción. Para guardarlas, mejor un recipiente o bote hermético.

Bon profit,  bo proveito, que aproveche!